Testimonios
Cómo nuestros clientes describen su experiencia con las terapias biomagnéticas con IMAN-SANA
Javier Altamira
Tras siete años de dolores abdominales severos y una recomendación de cirugía por una vesícula inflamada, Javier Altamira optó por la terapia de biomagnetismo, lo que mejoró significativamente su salud y fortaleció su fe en las terapias alternativas. Otro paciente relata cómo el biomagnetismo alivió el dolor y estrés causado por bacterias intestinales que afectaban el hígado y la vesícula en solo tres sesiones. Ambas historias destacan la importancia de una mente abierta, fe y cuidado compasivo, motivando a explorar estas opciones antes de recurrir a la cirugía.
Marta Díaz
Inicialmente escéptica, encontró confianza en el profesionalismo de los terapeutas y quedó sorprendida por la eficacia del tratamiento. Tras las sesiones, su madre, quien enfrentaba graves problemas de salud como hipotiroidismo y depresión, mostró mejoras notables en su movilidad e independencia. Agradecida y optimista, considera la terapia un paso clave hacia el bienestar y planea continuar con el tratamiento para mantener los avances en la salud.
Adriana Díaz
Se comparte la lucha contra la depresión severa y la ansiedad, una batalla que duró un año y culminó en pensamientos suicidas, a pesar de haber consultado con varios médicos. Inicialmente escéptica sobre las terapias alternativas, se encontró con alivio a través del biomagnetismo, tras la recomendación de una amiga. Este tratamiento se convirtió en un punto de inflexión en su proceso de sanación.